Ayuda entre hermanos...

 

Pues nos toca seguir con el tema académico… (por lo visto nuestra rama está formada por grandes intelectuales XD ).

  Desde hace un año aproximadamente estoy recibiendo clases particulares de inglés. Estas clases me han servido para mejorar e ir cogiendo cada vez un mayor nivel en el idioma. 

¿Pero acaso soy yo el único que se beneficia de esas clases particulares? ¡¡Definitivamente no!! A mi hermana también le están  sirviendo de mucho, porque en la medida que yo voy adquiriendo destrezas y perfeccionando la lengua inglesa, estoy más capacitado para solventar las dudas que a ella le puedan ir surgiendo. Uno de mis favores, por lo tanto, va a ser ayudar a mi hermana pequeña en todo lo que ella necesite y esté relacionado con ese idioma que tantos quebraderos de cabeza nos da; ya sea con redacciones, con los famosos ‘speakings’, actividades de gramática o cualquier cosa que se precie.

   Tengo que decir que estoy muy satisfecho con mi favor. Mi hermana saca buena nota, seguimos con la cadena y sobre todo… Hoy por ti y mañana por mí.

Iñaki, Pamplona

Enfermo ayer, conmigo hoy.

   Tengo un compañero que ha estado gran parte del trimestre enfermo y sin poder asistir a las clases. Afortunadamente ahora ya está mejor y ha vuelto al instituto, pero, al asuntarse tanto tiempo, anda un poco perdido.

  El otro día hablando con él me ofrecí a ayudarle en todo lo que necesitase, a explicarle personalmente todo lo que se había perdido durante su convalecencia, los nuevos temas de las asignaturas y a repasar con él todas las asignaturas.

  Decidí dejarle también mis apuntes para que se los fotocopiara y así poder seguir los dos a la vez los contenidos.

  Me parece que éste mi primer favor va a ser bueno tanto para él como para mí, ya que estamos en segundo de bachillerato y es un año duro en el que hay que ponerse las pilas y prepararse para lo que nos espera. En cualquier caso: ¡nosotros podemos!

Andrea, Pamplona

Cocina con corazón

Mi compañera de clase Carmen, siempre ha querido aprender a hacer postres. No tiene mucha mano para eso de la cocina, por ello mi primer favor va a consistir en enseñarle a cocinar.

Comenzaremos con unas natillas de chocolate blanco con trocitos de chocolate negro dentro. A pesar de las complicaciones surgidas en el procedimiento (aunque creáis que no, puede haber complicaciones realizando un postre tan sencillo), hemos conseguido prepararlo con éxito. 

De este favor ha salido beneficiada mucha gente, mi amiga está aprendiendo a cocinar, yo me llevo la satisfacción de haber ayudado a alguien y toda su familia ha podido terminar la comida con un postre hecho con amor.

Aida, Pamplona.

Apoyo de Matemáticas

¡El primero de los favores de nuestra cadena! Y qué mejor manera de comenzarla que con clases de apoyo de matemáticas. Antes del examen... ¿A quién no le viene bien un último repaso de los ejercicios que no se tienen claros? Pues esto es lo que hicimos durante toda la tarde en la Biblioteca.
Objetivo Aprobar. Pues eso, Hoy por ti, mañana por mi.

Miguel, Pamplona.